Abandonamos de momento la serie de notas sobre la crisis que veníamos entregando en este blog para referirnos a un tema muy de futuro. Se trata, como se dice en el título, de la inmortalidad, asunto al que la revista Time ha dedicado recientemente una portada y un reportaje de cierto interés.
La portada del número de la revista Time del pasado 21 de febrero viene dedicada al año 2045 y lleva el subtítulo “El año en que el hombre se hace inmortal”. Pensando en este blog dedicado a la Prospectiva resultaba obligado leer el número de la revista en cuestión y analizar con detalle el reportaje al que su portada hacía referencia.
El reportaje, incluido en el interior de la revista a partir de la página 20, y debido a Lev Grossman, es extenso y de gran calidad periodística, pero para este blog y para el que lo hace no hay ni media línea que no haya sido ya tratada con detalle en posts anteriores, algunos de hace varios años. Se refiere casi todo él a lo más básico y más conocido de las ideas de Ray Kurzweil al que nos hemos referido aquí extensamente. Hace particular referencia al concepto de Singularidad y a todo lo que Kurzweil y sus colaboradores han organizado alrededor de dicho concepto: “Singularity Summit”, “Singularity University”, “Singularity Institute for Artificial Intelligence”. Su famoso libro “Singularity is Near” publicado en 2005 y que en gran manera es una actualización de sus dos previos libros, “The Age of Intelligente Machines” de 1990 y “The Age of Spiritual Machines” de 1999, es citado ampliamente.
La Singularidad en manos de Kurzweil, dice Goodman, no es sólo una idea sino algo que atrae a mucha gente que se siente unida alrededor de ella. Es un movimiento o una subcultura, o como dice el mismo Kurzweil, una comunidad. Muchos de los incorporados a ella se llaman a sí mismos (en inglés), “Singularitarians”.
En el centro del reportaje se sitúa la bien conocida ley de los “Rendimientos Acelerados” de Kurzweil, según la cual el progreso tecnológico se produce exponencialmente, algo que no resulta intuitivo para el hombre, acostumbrado más bien a procesos lineales. Debido a dicho crecimiento exponencial de la tecnología Kurzweil cree que llegará un momento en el que el proceso tecnológico será tan acelerado que el hombre tal como lo conocemos hoy no podrá hacerle frente. Será el momento de la Singularidad, en el que el hombre se habrá transformado en un ser posthumano mitad hombre mitad máquina.