Importancia de la economía. Autores: Adolfo Castilla y José María González del Álamo. Innovation Wars, S. L. CIBUC. https://www.innovationwars.com/
Para decir algo sobre la gestión de empresas e instituciones que necesitaremos en el futuro inmediato, resulta importante hacer un resumen de las actividades de nuestro mundo a las que nos referimos. Son actividades muy conocidas por todos y en las que, en general, participamos muy directamente. Vivimos, de hecho, de ellas, y en nuestras sociedades son bastante numerosas las personas que empiezan a trabajar en una empresa a los 24 años y se jubilan a los 65 en la misma empresa y, a veces, en el mismo despacho. Es lo que llamamos empleo, sobre lo que en general utilizamos expresiones como, “que sea fijo” y “que no falte”.
Épocas como la actual en la que el desempleo se dispara, y no solo por la pandemia que vivimos en los últimos meses, son enormemente difíciles y graves para todos. Es importante salir con rapidez de ellas y no hay cosa mejor que recordar los mecanismos que nos permiten hacerlo. Son, fundamentalmente, los procesos de producción de bienes y servicios, su distribución y su uso y consumo. Todos ellos deben, primero, ponerse en marcha continuamente, y, segundo, ser realizados con eficiencia y efectividad. Es decir, y dicho de nuevo, los hombres y las mujeres necesitamos, saber emprender, saber hacer y saber resolver.
(imagen de arriba, Waimea Canyon, western side of Kauaʻi in the Hawaiian Islands )
Dependemos de lo que producimos e intercambiamos

La empresa y su gestión son muy importantes en nuestro mundo porque todos dependemos del proceso general de producción de bienes y servicios, de su intercambio y de su utilización y consumo. Uno de los instrumentos básicos de ese proceso es la empresa, la cual no es otra cosa que la institución creada por nuestras sociedades para ser la depositaria, o responsable, de dicha producción.
El empleo, por otra parte, es el instrumento generalizado por el que nos conectamos todas las personas a los fenómenos de creación de riqueza y su intercambio, a los que, en su conjunto, llamamos economía.
El mercado es, asimismo, un mecanismo fundamental, que permite el encuentro de la oferta con la demanda. Existen, de hecho, dos grandes mercados, el de los bienes y servicios y el de los factores de producción.
Dirección e Inteligencia Colectiva
En el empeño en el que estamos de conjeturar sobre cómo serán las cosas tras la pandemia en el terreno de la economía, la empresa y la producción de bienes y servicios, además de sobre cómo nos encargaremos de gestionarlas, hacemos ahora un ejercicio de definición de términos y actividades muy comunes y muy conocidos por todos. Dedicaremos tres posts a ello. El presente y dos más.
El motivo de detenernos en esta cuestión, teniendo en cuenta que todo el mundo conoce estas actividades y está familiarizado con ellas, es que, todos, efectivamente, las vivimos y nos interrelacionamos con todas, pero, con frecuencia, no sabemos definir su misión con precisión ni explicar en lo que consisten.
Para todas las actividades que vamos a mencionar hacen falta las tareas de dirección, gestión y administración a las que nos hemos referido en el post anterior. Y no será difícil entender que en todas, se necesitará, cada vez más, la Inteligencia Colectiva de la que hablamos en este blog.
Economía
Hay tres acepciones de esta palabra:
1) como “conjunto de fenómenos existentes en nuestra sociedad relacionados con la producción de bienes y servicios, su distribución y su uso o consumo”, hablamos en este sentido de economía de un país o de una región;
2) como “ciencia o teoría económica que explica dichos fenómenos y establece leyes sobre los mismos”, decimos por ejemplo, que el consumo en un país depende directamente de la renta disponible de las familias o que la inversión depende de los tipos de interés, sabiendo además que las leyes económicas no son tan precisas como las de la física, y que a menudo una variable depende de varias otras y hay siempre un término aleatorio, es decir, que dichas variables no explican la variable dependiente al cien por cien;
3) como “Oikos Nomos”, término griego que significa, literalmente, manejo de la hacienda o, más precisamente, administración de la casa.
La importancia de la economía en nuestro mundo es enorme, aunque es verdad que los hombres tenemos otras tareas y cometidos a los que debemos prestarles atención también.
Producción
Una definición escueta puede ser: “la transformación de recursos en productos o servicios que satisfacen las necesidades de las personas”.

La producción de bienes (productos) y servicios, es fundamental para que nuestras sociedades y las personas que las componen puedan vivir. Cuando la producción se viene abajo todos lo pasamos peor en el mundo que hemos creado. La producción lleva consigo el término económico de “valor añadido”, que no es otra cosa que el valor neto que una empresa añade a lo que compra terminado, en forma de factores de producción empleados: mano de obra, capital, tierra, tecnología y otros factores más intangibles como la innovación, el diseño, la marca, etc…
De todos los factores de la producción el más importante y, fundamental, de hecho, es el empleo. Y no deberíamos interpretar nunca como «mano de obra» a las personas empleadas. El empleo es la forma de vida de las personas y lo que les permite, vivir, crear una familia, disponer de una vivienda, educar a los hijos, tener una seguridad social y ahorrar para la vejez. El empleo da sentido a la vida de las personas y las hace felices, por encima de las dificultades que a veces lleve consigo. Es, por otra parte, la mejor forma de distribuir la riqueza que se crea en una economía. Todos los países deben prestar una atención especial a conseguir lo que e llama, «pleno empleo».