Terminamos con este post los cinco dedicados a la Gestión del Conocimiento. Dos han estado destinados a recorrer la historia de esta materia y tres a hacer consideraciones sobre su aplicación en la empresa. Concluimos preguntándonos por los motivos que han llevado a prestar atención de una manera específica a los conocimientos en el mundo de la empresa y por la aparición del área de actividad, teoría, metodología y técnicas a la que se ha denominado Gestión del Conocimiento. La llamada Economía de la Información y del Conocimiento, la importancia de los intangibles en el mundo actual y la búsqueda del llamado «capital intelectual», son señalados como fenómenos desencadenantes de dicha atención
En cuanto a la pregunta de “¿por qué surge ahora?” la Gestión del Conocimiento, tampoco se puede decir que sea algo totalmente novedoso. El motivo de su aparición como materia específica está fuertemente relacionado con la idea del “capital intelectual”, con la importancia en la empresa actual de los activos intangibles y con la llamada economía de la información o del conocimiento en la que nos adentramos. Los casos de empresas jóvenes como Microsoft, e-Bay, Amazon, CISCO y otras ya mencionadas, que con activos reales muy reducidos superaban el valor en bolsa de grupos tradicionales tales como General Electric, IBM o Lucent Technologies, conocidas por sus impresionantes activos físicos, ha despertado el interés de los estudiosos de la empresa. La diferencia entre el valor de los activos físicos y el valor astronómico en bolsa alcanzado por muchas de esas nuevas empresas, se ha achacado a intangibles tales como el talento de sus empleados, la eficacia de sus sistemas de gestión y el carácter de sus relaciones con los clientes. A todo ello se le denomina hoy “capital intelectual”, siendo de la máxima actualidad la identificación, medida y registro en la contabilidad de todos los intangibles que dicho capital representa. La idea ha existido desde siempre, ya que el viejo concepto de “fondo de comercio” o “good will”, utilizado en la compra de una compañía es un concepto similar al de “capital intelectual” actual. Con tal denominación se ha hecho referencia desde muy antiguo al valor adicional sobre los activos reales que se pagaba por una compañía. Era algo difícil de medir que se asignaba a intangibles de todo tipo poseídos por la compañía a comprar.
Más nueva es la idea de “economía de la información”, “economía del conocimiento” o “nueva economía”, la cual se refiere al hecho que muchas de las nuevas empresas con éxito, producen e intercambian bienes de información y conocimiento. También con la realidad actual de que el valor añadido en muchas de las partes de la cadena de valor es información y conocimiento.
En cualquier caso, e independientemente de que la GC nos guste más o menos, de que la consideremos una técnica antigua o nueva, o que su práctica nos parezca más o menos revolucionaria, su uso se está popularizando en la empresa y se popularizará mucho más a medida que la “nueva economía” se vaya introduciendo en el mundo.
Su relación con las Tecnologías de la Información es clara, a pesar de que sus introductores se esfuercen en decir que una Intranet no tiene nada que ver con la Gestión del Conocimiento, aunque la facilite. Sería algo así como decir que el Genoma Humano no tiene nada que ver con las Tecnologías de la Información, aunque sepamos que sin ordenadores no se habría decodificado dicho Genoma.
Para uno de los objetivos generales de esta colección de artículos, como es la constatación de la relación estrecha entre el Management del siglo actual y las Tecnologías de la Información, la relación entre la GC y dichas TI, a pesar de las distinciones que podamos hacer entre una y otras, es más que suficiente y avala de nuevo tal objetivo.